Farid Uddin Attar
Farid Uddin Attar, cuyo nombre real era Abu Hamed Mohamed B. Abu Bakr Ebrahim, nació en Nishapur (Jorasán, Irán) en 1145 y murió en el año 1221.
En su juventud viajó a Egipto, Siria, India y Asia Central.
Fue un célebre poeta y místico musulmán de los siglos XII y XIII, uno de los grandes maestros y poetas de la literatura sufí y su influencia fue considerable tanto durante su vida, como después de su muerte.
Se cuenta que en la ciudad de Nishapur conoció al joven Rumi a quien renombró como Yalal ad-Din. Al parecer el Jeque Attar quedó muy impresionado por el joven, y le dijo a su padre luego de regalarle una copia de su «Asrar Nameh» (Libro de los secretos): «Pronto este hijo tuyo hará arder a los aspirantes espirituales de este mundo».
Sin embargo Attar no mencionó claramente a ninguno de los sufíes de su tiempo como su propio maestro, aunque es obvio que, desde su niñez, animado por su padre, admiraba a los grandes santos sufíes del pasado, sus enseñanzas y formas de vida. Su extensa obra está influenciada por Al-Ghazali, Hakim Sanai y Abu Yazid Bistam.
Dicha obra la realizó simultáneamente a su actividad de perfumista, boticario y vendedor de especies. De hecho, Attar significa “perfume extraído de flores, hierbas o especies” o “farmacéutico”.
Escribió más de un centenar de obras de las que merecen destacarse El coloquio de los pájaros, El libro divino, El libro del consejo y el Memorial de los santos o Primeros Maestros sufíes.
La irradiación de su obra poética fue reconocida por su continuador y reconocido sucesor literario, Jalaluddin Rumi.